No sé si soy la única o si todas las madres nos sentimos así (al menos a veces). Pero me siento culpable. ¿De qué? De muchas cosas. De trabajar por ejemplo un sábado y dejar a mi enano con su nana. O de irme de viaje con mi esposo 3 días y dejarlo con mi mamá. O de hacer una guardia de 24 horas y al día siguiente llegar tarde y cansada y con las justas poder llegar a acostarlo. De estar cansada muchas veces y de sólo querer dormir, mientras mi hijo me pide que haga de Stephany y el de Sportacus. De a veces no entenderlo cuando lo que quiere es jugar y yo quiero que se duerma rápido para yo poder salir a comer fuera. De no tener la fuerza (y aguante) necesario para seguirle el paso. De no poder llevarlo (a veces) a alguna fiesta infntil o a la casa de algún amiguito. De no hacer más por él. De hacer mucho por él. De no hacer más por mí. De hacer mucho por mí.
Me asalta la duda muchas veces y me pregunto: ¿estaré criando bien a mi hijo? ¿serán correctas las formas en la que lo estamos educando? ¿estaré siendo muy estricta? ¿estaré siendo muy permisiva? ¿será un niño engreído por el hecho de que es único? ¿será un niño solitario? ¿tendrá problemas en el colegio? ¿será que le compramos muchas cosas? ¿será que por no engreirlo demasiado, no le compramos muchas cosas? ¿por qué no hay un manual para padres? ¿por qué no se te prende un foquito rojo cuando no estás actuando bien o cuando no estás manejando bien la situación?
Toooodo el mundo me dice: eso te pasa por tener uno sólo, si tienes dos no tendrías tiempo de pensar esas cosas, me dicen que soy una egoísta, me dicen que no sea floja (en realidad soy super floja, demasiado). Pero mi realidad es ésta: tengo un hijo único y no voy a tener más. Mis razones las tengo y no es una sola, son muchas. Admiro a quienes pueden tener más y a veces hasta las envidio un poco (pero a veces no más, la mayoría del tiempo digo Gracias a Dios!). Detesto que me pregunten: ¿y el otro? ¿para cuando? (aunque admito haberle preguntado lo mismo alguna vez a alguna madre con un sólo hijo). Odio cuando alguien dice: Uno es Ninguno. Eso no es cierto. Mi Sebas no es ninguno, lo es TODO. Amo a mi hijo sobre todas las cosas y quizás por eso me frikeo tanto con el tema de si estaré criándolo bien o no.
Y bueno, últimamente estoy con muchas cosas en la cabeza, se vienen grandes decisiones (con grandes responsabilidades) y además siempre no faltan algunos problemas, pero parece que ahora se han juntado todos. Días como hoy son los que más extraño a mi amigo querido, quien está en el cielo y que espero me envíe alguna señal... PLEASE!!
Debe ser también que ando media depre porque ya empieza mi licencia el 01 de Julio y dejo el Hospital que tanto me gusta. Espero aprovechar ese tiempo a todo dar, espero que no me gane la flojera, jajajaja.
Saludos!